Pocas palabras , ando
febril de ellas últimamente ; pero no puedo evitar eludir a aquel que dejó en mi el rastro más
duradero ; algo significa , algo más que una reminiscencia juvenil , cuando
una canción , un disco , una actitud permanece con nosotros una vida entera ; pensaba
que nada es nunca presente interminablemente salvo las estaciones y los astros
, y no todos , pero no es así ;
hay quien deja huella imborrable , aunque lleve adherido el agravante de contemplarlo
ya desde la cínica mirada que la edad impone .
Crying for my Baby
no fué grabada nunca en estudio ,
que yo sepa ; pero exhibe en su expansiva puesta en escena las mejores cualidades de los primeros Mink De Ville y demuestra una vez más que Willy no era de
esa clase de artistas que precisara del aislamiento y la distancia para poder transmitir lo que les hierve por dentro ; al
contrario , el siempre escenificó su pasión
, gran actor , de los que se creen
su propio papel ; casi nadie caminamos contentos con la suma de nuestras
facciones , pero él si , energía
viva y romanticismo sano ,
elegancia punk , humanidad asimilada
, sardónico e ingenuo , tierno y chulo , capaz incluso de hacer que brote un deseo dormido y primario donde no lo había y
hacerlo dolorosamente persistente
; el rock´n´roll no deja de ser una abstracción de porosidad
aun no resuelta y Mink De
Ville mantiene para un servidor pasado el tiempo el carisma , romanticismo , personalidad ,
carácter y honestidad que nunca debiera haber abandonado el rock´n´roll
; cada cual cargamos con nuestro
particular sistema de valores y gustos . Crying for My Baby . Mink De Ville . Un Icono . Banda
sonora vital ; sí , algo
febril.....
Será la elección
premeditada de una mezcla del sonido en mono o la propia
ejecución y el oficio de una
banda curtida en la carretera y en el escenario , Hunter conoce bien todos los trucos y
domina las herramientas con las que trasladarnos de inmediato a aquel día entre los días y a la pequeña sala donde el sudor , el humo y los sueños
se funden con el soul y el
rythm&blues ; desde la primera
escucha , la que provoca estas palabras
de no fingido entusiasmo , un festín
para los que nos deleitamos todavía con
los sonidos añejos , orgánicos , epidérmicos .
Soy templado
, festivo y penosamente saltarín por naturaleza pero
no fui bendecido con la gracia de
saber mover armónicamente el esqueleto
; y aunque intento evitar
el ridículo público nunca he podido evitar
moverme con los ritmos salvajes , descontrolados , raciales e instintivos de un buen
rythm& blues , me dejo llevar , me puede ; y con Hunter me hago
cruces porque se hace difícil pensar cuando lo escuchas que es un disco de hoy ,
tan clásico ( 50´s -60´s )en el mejor
y más amplio sentido de la palabra ; y
encima canta que da gusto , con esa negritud e inflexión vocal –exagerada
o no - que tan impregnada llevamos en nuestra pasión – hoy nuevamente renovada - por estos ritmos ( Motown , Stax in my mind )
, si es que parece uno estar escuchando al
mismisimo Wilson Picket en la chispeante canción que da título al disco .
Algo ha cambiado en este
hombre ; sé que es un tipo de no muy fácil trato y poco accesible , y eso me distanciaba de él ; pero lo percibo distinto , el
hecho de haber perdido a su mujer en el 2011 me hacía pensar en otro tipo de disco ; pero ya el hecho sorprendente de extender su nombre al menos al número de componentes de su
banda parece un acto de generosidad no muy frecuente en él ; la respuesta está en
el extraordinario contenido de este
Minute by Minute , un verdadero banquete sonoro condenado a ser disfrutado por mucho tiempo ; ¡ que buen cartel haría junto
a mi admirado Eric Lindell para
resucitar de una vez por todas el Luna Lunera ¡
El pasado en color , el presente en blanco y negro , es como genialmente
Peckimpah representó el cromatismo de la memoria de sus protagonistas que huían de si mismos y su propio destino sabedores de que el hecho de moverse
protege , que lo arriesgado es estarse
quieto porque eso nos hace vulnerables ;
invirtió la paleta de
colores en la película ofreciendo
el color a los buenos , viejos
tiempos felices ; y es que aunque la felicidad parece que siempre está por venir y nos remite a un futuro , no es así siempre pues
muchas veces remite a un pasado remoto del que la extrapolamos al futuro
remoto con un movimiento mecánico de autodefensa , de hecho solo podemos soñar
el pasado y confiamos en que seremos
felices porque alguna vez lo fuimos .
Billy 4 no es una canción escuchada , ni siquiera disfrutada
, es una canción vivida ; y hoy
vuelve a casa decorada
en sepia , con la grieta y arruga inevitable del tiempo transcurrido y con la misma sensación de huida ; y es que las notas y las palabras , pronunciadas o cantadas , con significación
o sin ella , se liberan , se extravían y
empiezas a comprender algo : es en este momento , la primera que creo
que Dylan la canta en directo
, cuando
la historia –abandono , resistencia, soledad , esperanza y desesperación
de la mano – deja de alguna forma de pertenecer a su autor para ser de todos , condenados a separarnos o a encontrarnos siempre ; somos insoportablemente humanos , todo lo que nos pasa le pasa a cualquiera ; y Billy 4 aquí en medio como testigo , en su
voz actual como vestigio sin
perfume en el que poder rastrear su
historia y la nuestra aunque tal
vez no completa , quizá algo fantasmal ,
fragmentaria y orgullosamente vestida de lagunas ; y libre
e inquebrantable , dando un
fuerte golpe en la mesa a ésta época dedicada a la obviedad , a lo superfluo y a la
simpleza , aunque esta tenga sus matices, claro ; así nos va….
No soy ningún entendido ( hay quien lo debe pensar ) ni ningún
experto ni erudito ( haberlos los hay ) en Bob Dylan ; sencillamente sus canciones son fotogramas de
una biografia por fortuna inacabada , una constante , y su música
me ha llevado siempre de la mano desde la niñez a lugares
interiores que nunca llegué a pensar que pudiera estar , al abismo mismo de mi propia condición ; siempre me ha contado cosas , que aun no sabiendo el qué , he abrazado como propias ; como hoy
nuevamente Billy 4 , con la misma coherencia interna , con la misma atmósfera desencantada ; extrañamente
identificable , reformulándola sin perderla de vista , y libre , siempre libre…..
Motel Matches tiene la persistencia de las canciones acogedoras
, difícilmente descifrables ,
dulcemente turbadoras y estremecedoras
; al menos la lluvia siempre para ; Motel Matches adorna
– con su magnífico piano y órgano - mi biografía , o al menos la suaviza y hace
que me de cuenta de que no importa nada no saberlo todo , demasiada
acumulación en la memoria parece hacer fermentar mi juicio
y por eso me vuelvo abrigar con esta
canción , que parece adherida a mí
como la gota de sangre en el
suelo , con su cerco que se resiste a desaparecer y se aferra
ahí donde cae para hacer más difícil su difuminación , o su olvido ; la
lluvia , al menos , siempre para .
Fragmentos y fogonazos de un momento anterior no anotado , un Costello
intenso , evocador ( el espíritu del Sur llevado
al límite a su terreno ) , elegante y tierno me emociona y desarma con virulencia e iconoclasta
genialidad ; porque esta canción
, como todo , tiene su reverso , es como la enfermedad y su vacuna , subjetiva e
inevitablemente parcial porque la hago mía
y porque todo encierra su contrario ;
las notas de Motel Matches
tiemblan en mí y se expanden ;
y en su dulce desgarro , me hacen pensar que nada de lo grave e ingrato parece nunca tan grave
e ingrato al cabo del tiempo , de hecho desaparece el rastro y el eco en su propia niebla ; la lluvia siempre para .
Llevo a Santi al colegio de la mano pero me doy cuenta de que es él el que me lleva a mí , me confió en él y me retrotrae al difuso espejo de lo que fuí ; su mano y sus dedos pequeños consiguen reducir lo enorme a su medida , ajustar la dimensión del mundo a su pequeñez , comprender lo inmenso
mediante lo minúsculo : de todo
el campo abierto de la ribera solo le
interesa el caracol fosilizado
encontrado en su mano .
Su mano de niño , aunque
tozudamente temporal y provisional , es firme y algo húmeda ( vida líquida en plenitud ), es mi ser paralelo , mi prolongación , mi espejo inesperado ,
todo lo que no recuerdo de mí es él y su
brevedad de niño hace que mis pensamientos sean cada vez más flotantes , sin contenidos
concretos ; bajo un cielo insistente
vamos de la mano , la grande y la
pequeña , formamos un núcleo y no nos
excluimos , en su mano palpo la vida que se armoniza en él y en su ligero temblor se adivina una primera delineación del mundo ; intuye , adivina la vida y parece querer incorporarse a ella sin saber que ya está dentro de ella .
Su mano me simplifica pero no puedo evitarle que se asome al espejo ni dejar de señalarle
lo conveniente porque llegará el instante
- campo de minas no respirado - de esquivar
las argucias , falacias , cautelas y
traiciones que ese desaprensivo y
menesteroso mundo que hoy se nos despega le brindará en bandeja de plata ; hoy ese mundo le pertenece de
forma natural y cabe entero en su mano pequeña , esa misma que ignora inocentemente su mañana
.
Vamos de la mano al colegio , yo confuso , el distraido ; busco en su
espejo al niño que pasó también por ahí pero ya no lo encuentro , al menos lo que no
viví en mí lo vivo en él , lo que no recuerdo de mi es él ; en su mano , que es mi espejo ; creo que por eso me decido
a escribir , escribir es jugar y jugar
es ser niño por un instante.
Nada peor que buscar el
sentido o la intención o creer que la hay , creer
que en todo hay deliberación y
coherencia ; pienso que Smile
no fue del todo bien acogido y
sí mal digerido su riesgo ( para muchos
desorientación ) , sin embargo la calidad
de su Sonrisa , su espontaneidad ( en simultaneidad con la mía tal vez ) y sus canciones delatan
la instintiva sensibilidad pop de
un Louris brillante , iluminando CANCIONES que son promesas de nostalgia e inminencia
, atisbando un futuro , que como
casi siempre en el – decepcionado por su
presente- imaginaba incierto.
Hay quien vió en Smile una especie de simulacro ( sonoridad sintética ) , casi un fingimiento tras
sospechosas baterías y sintetizadores pergeñados por
Bob Ezrin y además todavía no
nos habíamos hecho a la idea de que Olson ya no estaba ; y es que aunque se perdió aquella
combinación astral y mágica , aquella
que quedó grabada a fuego y que
parecía alumbrar una tercera voz invisible
que iba más allá de la suma de
sus partes , soy de los que creo que fue beneficioso para Louris
porque obtuvo la independencia creativa
que necesitaba , libertad para el riesgo , talento exquisito e inquieto el
suyo.
Smile es otro nuevo alarde lírico que
guarda estrecha relación con su anterior Sound
of Lies , de equlibrado cuajo
melancólico , pero retrata
con mayor nitidez las nuevas
inquietudes musicales – encontrar el
groove necesario - de Louris ;
llegado a este punto pongámonos en situación , lugar y momento preciso y antes de seguir evitemos comparaciones con Hollywood Town Hall
y Tomorrow the Green Grass , son únicos
; dejémonos llevar por esa sonrisa que
desarma….
No sé si me deuda con Smile es simbólica o real,pero
apareció enmomento oportuno , ya
sabemos quedetrás de cada discoque abrazamos como propiohay una historia ,o más de una ; también es cierto quequedó más enraizado en mí al poder asistir a dos conciertosdelos
Jayhawkspresentándoloen sociedady comprobarla encarnadura
realde la que están hechas las
canciones de Gary Louris ,que llevan la
verdadpor fuera, su carne , al ser aireadas y compartidas ;porque quizá ,sí , un poco , se les fue la mano en el
último tramo del discoperoesa producción tan pulidanoconsiguió castrarla fuerte
enjundiade sus canciones ; extinguida la esenciarootsytiene sin embargoSmileindelebles reminiscenciasde la
manerade hacer artesanalde muchos de los discos alumbradosa principios de los 70;tantacapapuedemaquillarun estado de ánimo inestablepero nola substanciamismade una cancionesque siempre he visto de una
comercialidadindiscutible ; de
hecho, esa fue la orientaciónque se le quiso dar a Smile, The
Jayhawksera un grupocasi
aristocratizadopor unos pocos( durante muchísimo tiempo mi secretooculto )peromuy poco vendedor ; ha sidocon el tiempo- y yo testigomudoy feliz por ello -cuandoha venido a ser prestigiado por
su propia permanenciay reconocido como
uno de los grupos capitales de la música americana ;la historia , aunque a menudo demasiado tarde
, siempre dicta justa sentencia.
Abrigaría Louris de nuevo su particularlecturade los abiertos páramosde lainsondable cultura musical americanacomorespuestaa la necesidad de anclajes más sólidos pero Smile representa- aun se oyelejanoel rumor de la discordia
que provocó -un eslabónnecesarioen su preclaratrayectoriapues es unfértil viaje en los límites de laalegría y la tristeza; alejado
del sonido clásico de la banda,estaSonrisa es cromáticay un intento
de regeneraciónartísticaque debería ser vistocon miradadiáfana y amplia , nadahay peorque buscar la intención o pensar que la hay .
Gary Louris se encuentra en el olimpo de mis elegidos , deidades imaginadas donde el placer no es efímero y sí sostenido , la última
rock star que me queda , un egoista lírico que todavía hoy me deslumbra ; no trato de comprender , tan sólo dejarme iluminar ; con una sonrisa…..
Blood and Bone es dulce , suave , amable , y muy eficaz ;
ignoro si Wes Carr es el tipo de
autor proclive a convertirse en
personaje de sus canciones , sólo sé que una canción tan desnuda como esta únicamente se la
pueden permitir los valientes ; y
eso que , enterándome de que fue ganador de un concurso
televisivo de nuevos cantantes en
Australia estuve a punto de salir
corriendo ; en cualquier otro momento
, como siempre , ya lo hubiera hecho , pero estoy ido , como
abstraído , por eso permanecí a su lado ,
me temo que de poco sirven los manuales críticos ante canciones como Blood and
Bone ; siento un rechazo visceral a todo programa organizado para que todo canse enseguida (
insuficiencia de la cultura dominante ) , para formar insensibilidades o anularlas ( tartamudas , superficiales e
inservibles ) , para homogeneizar voluntades
pero esa vena que late introvertida tras Sangre y Hueso parece
anestesiar por un momento mi
aversión porque simplemente consigue que
me afecte de algún modo y apaciguar los nervios
rotos.
No sé que diablos está
pasando pero dicen que estoy en los huesos , incluso a
los míos los noto alarmados , por eso me
hará bien la fugaz escapada de este próximo fin de semana al mar ; aunque solo sea por un rato caminar por los acantilados del Cabo de Ajo y mimetizarme
unos instantes en el paisaje ; conozco bien sus aristas y secretos y sé
que en ellos puedo por un instante simular que no hay nadie , desprenderme del propio nombre , resultar
invisible a voluntad ; pero quiero empezar a renunciar a prestarme atención , sé muy bien que mirar hacia fuera es mirar hacia dentro ,
y sé bien y quien me conoce que no
encierro peligro pues mi única
voluntad es adaptarme mejor a las
cosas y relacionarme más armónicamente con los que me rodean ; si de
carambola lo consigo conmigo mismo podría llegar a cerrar el círculo , sangre y
hueso , amable brisa de azar y sal.
Detrás de Buffalo se
encuentra Wes Carr del que nada me hace
sospechar ocultas intenciones , esta
canción parece venir
bienintencionada ; mi amor a la música
lo abraza ( casi ) todo ( todo lo bueno , quiero decir ) y sólo
el hecho de que alguien exponga públicamente
lo que compone merece mis respetos ; la
desinfectante seducción que
desprende Blood and Bone parece albergar
un filón expresivo a indagar , y eso que
finalmente no sé si he
superado ese prejuicio tan arraigado .
Nunca he sido
muy aficionado a los video-clips
, salvo excepciones siempre he
preferido poner mis propias imágenes si las sugieren , creo que me quedé en Ashes
to Ashes de Bowie ; pero hoy la
comparto para quien lo prefiera .
Las grabaciones de
Solomon Burke en Atlantic Records son un escandalosa anomalía
, de una densidad emocional que no se complace en la primera capa , en
su primera hendidura ; ofrece
la llave maestra con la que poder explorar en los resquicios
de la memoria , tan maltrecha ; y es que el hecho de que algo haya ocurrido no es lo suficientemente sólido para admitir
su propio relato , a veces la memoria se vuelve inverosímil y con el paso del tiempo , se aleja y entonces parece una fabulación ; a mi mismo
me parecen ficticios momentos que
he vivido y el tiempo parece
hacerme dudar ; una época nueva
rebaja la anterior y de este modo nos la estropea , nos la deja inservible ; algo parecido me ha ocurrido con esta voz casi profética , indeleblemente
universal , pues
sus supremos últimos discos
hizo que casi caducasen
el propio recuerdo de sus inicios .
Atlantic le vino de
perlas , porque aun lastrado por una férrea educación
eclesial que le mantenía cultural y emocionalmente agarrotado
pudo canalizar , codificar nuevas vías
en las que poder definirse artísticamente ; sin dejar de ser respetuoso con sus raices gospel
fue lo suficientemente mutable y
elástico para superar su mordaza y
abrazó las influencias más variadas del rythm & blues ;
superó - no olvidemos las
circunstancias de la época - lo local para lograr
esa vía de escape anhelada , esa
que posibilitaba la supervivencia artística
y personal .
Genio y figura , su voz brota en estas grabaciones desde dentro
hacia fuera como el ceremonial al que era tan aficionado ; una celebración - de
desvestida y natural expresión - del aquí y ahora , del hoy
y del ayer ; una nueva invitación a salir de ese hermético recinto sin porosidad
apenas al exterior . Espíritu y Carne . Solomon Burke.
Aun así , se ha partido en
dos ;
mantiene esa verticalidad que
tantos interrogantes estimula
e incita a pensar y repensar ante
su observación pero mis cuidados no han evitado lo que por natura ha provocado
el fuerte viento al que está
frontalmente expuesto ; observarlo así
incrementa la creciente sensación
de desorientación ,
de detestable incertidumbre
a la que finalmente tendré que abrigar como una certeza más .
Estoy destemplado , y mientras
paseo por el jardín deseo la
llegada del buen tiempo y la salvaje
y brusca erupción de las
plantas que lo adornan ;
observo a mi padre – mas bien la
sombra de lo que fué -dando vueltas y no
me asalta más que el deseo de que sea
testigo presencial de ese misterio que casi ilusoriamente se repite , el olor y el
color que todo lo inunda ; le quiero
mucho –todo- y por eso apenas me cuesta esfuerzo
ver el mundo con sus ojos y sentir lo que el siente ; el ciprés se ha partido en dos , y yo con el .
Escucho
How I Long to Feel de Gorky´s
Zygotic Mynci y en su atenuado y
magistral contagio pop – bucólica
fábula de ensueño - encuentro refugio
inesperado ; y me pregunto porqué y para qué tanto vuelco , dudas, vértigos y zozobras
que aceleran mi pulso cuando en
realidad no queremos más que engañarnos un poco y ser
algo más optimistas para seguir
viviendo con algo más de confianza y calma ;
estoy destemplado y no me
apetece volver a subir a la buhardilla (
frío concentrado) para intentar encontrar otro
giradiscos ( mi primer Dual ) que sé que me queda para ver si funciona ; he bajado dos viejos tocadiscos y ninguno
funciona pero sé que hay un
tercero , que no encuentro ; el viejo
Piooner de casa se ha cansado
y llevo dos semanas en la duda
de comprar uno nuevo o repararlo ; se ha partido en dos ; y yo con
el.
El cielo es el de siempre
pero no yo ; no consigo quitarme de la
cabeza en toda la mañana una noticia que
parecía escondida anoche entre otras aparentemente más importantes
: millares de mujeres embarazadas en esa
Africa de hambruna real , pura y dura , se envenenan intencionadamente para
que su hijo nazca enfermo y malformado y así poder aspirar a una ruin paga
familiar estatal con el fín de
, simplemente , sobrevivir ; no
encuentro hoy mayor aberración , un ser no nato que vive en lo amado cuya calidad sentimental viene decapitada previamente ; el amor radical ( y adscrito ) de la madre y el hijo guillotinado previa y prematuramente ; el ciprés se ha partido en dos ; y yo con el.
Esa atmósfera
casera y profesional , elegante y rural
,cuya INTENSIDAD escapa a las frecuencias en las que normalmente nos desenvolvemos
; Deep Dark Woods son una feliz e íntima debilidad ;
puedo pecar en ocasiones de
redimensionar el hecho mismo de haberlos descubierto furtivamente
, como si el azar hubiese querido
cruzarlos en mi camino ; pero el
refinado aliento de The Place I Left
Behind me impactó porque en el
intuía valores que
espantaban de un plumazo el adocenamiento
: honestidad , calidez , armonía , perdurabilidad ; un
disco de esos que sabes a ciencia cierta que no va a necesitar de prolongación artificial pues su
disimulada serenidad ocultaba
tantos remolinos interiores
como los que lleva estos días el
gran río en su regazo ; encontré en él muchos hallazgos , que no respuestas , y en
la limpia , refinada y suavemente trémula voz de Ryan Boldt un
calmante natural de gran capacidad para estimular y evocar .
No es el adelanto de su
esperado nuevo disco , pero traigo una
nueva canción bajo el brazo ; es la elegante aportación a la banda sonora de una película
de una adaptación del libro Safe Haven de Nicholas Sparks ; otra nueva
muestra de canción hecha de forma natural
- orografía que determina nuestro
carácter – y que reflejan nuestro tiempo sin pretenderlo , nuevo transporte a un estado de ánimo muy especial
: Deep Dark Woods.
El aullido como purga
a las propias limitaciones por la falta de persistencia
y al fácil contentamiento ;
recorremos un breve trecho y nos frenamos en seco como si de un miedo irracional a las indagaciones y a la perseverancia se apoderase de nuestra voluntad ; no se
consiente la mirada larga , esa que acaba afectando a lo que así se mira ; este delicado Howl On
parece inhibido pero es
esencial y ayuda a entender que no somos de una pieza , que dependemos una vez más
de lo que sucede a nuestro alrededor
y que no somos siempre así y de esta manera , que todo cambia , mejora o se estropea , o
bien se confirma ; más que hablar hoy quiero dejar hablar a quien esta deseosa de hablar y de ser escuchada , y poder observarla con atrevimiento interpretativo , con
sagacidad ; poder prever a esa persona , anticiparla , ponerme en su
lugar ; no , hoy no quiero auscultarme.
Me quedo con
este taciturno y cálido aullido de Bap
que es brisa ensoñadora y me hace sentir bien ,
como parte de algo , víctima y agente al
mismo tiempo de un inagotable contagio .
Un Holly maduro que no fue , la memoria imaginando el don supuesto ; da vértigo comprobar
las canciones que alumbró antes de
que el pájaro fuese abatido por
la furia de aquella tormenta
, no hay corrección posible a los elementos ; 54
años hoy de aquel día en que Buddy
nos dejaba con tan sólo 22 años .
Como la
escultura que encierra el bloque de
granito y aun no es , sigo pensando que
Buddy dejó todo exquisitamente formulado , delineado , implícito ,
como si todo su instintivo talento aun no hubiese tomado
cuerpo ; esbozado , sí , pero todavía irreconocible , primera capa
sin limitación ; fantaseo
muchas veces con un Holly
de esforzada y orgullosa
arruga ,
de calado y esencial , pero no es más que el presente
que infantiliza lo fantasioso ; de hecho
no soportamos no poder remediar el pasado , no haberlo podido
reconducir ni evitarlo ; lo trucamos o falseamos en ocasiones a nuestro
antojo o necesidad e incluso en
ocasiones llegamos a hacer el rídiculo con el pasado haciendo de
el un vomitivo espectáculo .
Recuerdo a Holly
hoy con lágrima cautiva
y emocionada sonrisa por todas
las canciones que nos dejó y que todavía seguimos disfrutando ; I Miss You ,
Buddy.